
La vida te da sorpresas, y aunque sea muy de vez en cuando...te da placeres. Eso resulta de enterarse del hecho de que Morrisey está de vuelta....y se agradece. La espera fue menor que para You"re the Quarry, que marcó la resurrección del gran Mozz después de un tiempo de ausencia...la verdad que citando a Fito, si Morrisey se fue alguna vez, nunca se alejó; siempre estuvo presente.
De escuchar Ringleader of the Tormentors, el primer track del disco, encontramos la provocación y sorna, con la que tanto disfruta Morrissey, y de la que tanto se jacta. La verdad es que la popmposidad de esta primera canción donde se confiesa como el cabecilla de los tormentos (y le creemos) es simplemente avasalladora, una especie de marcha triunfante. Ahora cuando escuchamos esos arreglos orquestales intuímos que algo se trama este señor. Y claro que es así. Este disco fue grabado en Roma, que puede ser uno de los factores que impregnaron la mística, mucho más festiva y alegre del disco. Pero eso no es todo, está la prescencia de Tony Visconty, artífice del sonido de los mejores discos de David Bowie...y guinda a la torta...... Ennio Morricone, en los arreglos orquestales.
La verdad es que algo sucedió en el universo de este apesadumbrado ícono, alguna ventana lo llenó de luz, aunque sea un momento, porque se nota que los lamentos son menos frecuentes...o tratados de otra forma...desde otro enfoque...como este líder de los tormentos....situándo al sufrimiento como un camino ya transitado..... como lo afirma en Life its a Pigsty (La vida es una pocilga, un punto bastante alto del disco).
You have kill me trae las melodías conocidas y quizá alguna señal de que el Morrissey llorón se desvaneció.... Hay actos de contricción como Dear God please Help Me y Ill never be anybody heroes now, ante dios (el de Morrissey....por eso las minúsculas) primeramente y ante su audiencia o su pequeño culto, después.
La idea de un quiebre se acrecienta en la ultima canción At last im born...o sea...decir al final he nacido....supone un quiebre. En fin no quiero extenderme eternamente..la idea es clara..algo le pasó a Morrissey en la bella Italia..... y lo reflejó muy bien en canciones como To me you are a work of art y en general en este disco que nos inunda y alienta a pensar que puede darse un nuevo encuentro entre el señor Morrissey y Chile....por lo menos los que lo vivimos el pasado SUE (2004) lo anhelan.

Lo que traigo como Bonus es un verdadero luijo para este espacio. De lo mejor que se ha posteado, sin lugar a dudas. Los dejo con un proyecto francés denominado Nouvelle Vague (Nueva Ola), término acuñado del cine francés de los 60, este laboratorio de exquisitez sonora protagonizado por Marc Collin y Olivier Libaux, se encargan de revisitar sus canciones preferidas de los ochentas, bajo los beats electrónicos y las cedencias de un lounge bossanova....sencillamente extraordinario. Punto aparte son las delicadas y bellas voces de las chicas invitadas Melanie Pain, Marina Celeste, Phoebe Killdeer, Gerald Toto y Silja. Ahora bien, estos ingredientes reunidos se encargan de reconstruir canciones como The Killing Moon (Echo and the Bunnymen), Heart of glass (Blondie), Dont go (Yazoo), Ever fallen in love (Buzzcocks), Blue Monday (New Order)..... especial mención se lleva Bela Lugosi"s Dead de los extraordinarios Bauhaus...y la despedida a cargo de Waves de los Blancmange....Les dejó esta gema fina y delicada, llena de ese french touch tan distinguido.....especial para reuniones con amigos amantes de la conversación. Disfrútenlo.
TOQUE FRANCES